“Anónimo Veneciano” es una película dirigida por Enrico Maria Salerno en su debut como director en 1970. La historia se desarrolla en dos tiempos: el primero desarrolla la historia de Enrico y Valeria, su mujer, que se encuentran actualmente separados pero que se encuentran en Venecia a petición de Enrico. La segunda línea se desarrolla a través de flashbacks que dan más detalles de la relación que mantenían los personajes y nos deja entender sus motivaciones y deseos.
La motivación principal de Enrico es ver una última vez a su mujer antes de morir por una enfermedad mortal que lo agobia. Inicialmente se porta evasivo y trata de enojar a Valeria con preguntas maliciosas, aunque ella poco a poco se va a dar cuenta de la enfermedad de Enrico y que aun lo ama, aunque inicialmente se comportara recelosa y molesta con este.
Al final de la película ambos personajes llegan a término con sus propios sentimientos y destinos, Enrico resignarse a la muerte luego de ver por última vez a su mujer, y Valeria comprendiendo que aun ama a Enrico y respetando su decisión de no volver a verlo nunca más.
Uno de los aspectos más resaltantes de la película es la ciudad de Venecia, la cual se ve desolada y ruinosa, pues los personajes parecen moverse en un pueblo fantasma donde transitan escasas personas y cuyo ambiente de decrepitud se relaciona con la enfermedad de Enrico. Para crear esta atmósfera, la música es un factor importante en la película pues posee un tono de tristeza y melancolía que sirve como preámbulo del desenlace. El tema principal es el concierto en Re menor para oboe de Alessandro Marcello, cuya denominación de “anónimo veneciano” da el nombre a este filme.
En conclusion, Anonimo Veneciano es una pelicula tragica, que si bien utiliza muchos temas reciclados, como el amor truncado, lo hace mediante la creacion de una atomosfera que intensifica el impacto emotivo de la trama.